Increpan damnificados a Gobernador en Hidalgo

Indígenas de la comunidad de Mecatlán y de el Arenal, pertenecientes al municipio de Yahualica, Hidalgo, increparon al gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca para exigirle apoyos para paliar los daños que dejaron las recientes lluvias en viviendas, caminos y cultivos.

Menchaca ya había encabezado el acto oficial de su gira y cuando iba de salida, la gente lo rodea y comienzan las exigencias, el mandatario prefiere ser prudente y no responde a nadie, intenta avanzar, pero la multitud se lo impide.

A gritos y empujones tal como se muestra en los videos difundidos en las redes sociales, Menchaca es escoltado por su equipo de seguridad, pero la gente insiste “Háganos caso gobernador”, le gritan.
“Queremos soluciones para el pueblo de El Arenal”, lanzan entre la muchedumbre que rechifla, que grita, que insulta y que avanza entre jaloneos.

Luego de los tensos momentos, el gobernador hidalguense agiliza el paso de un momento a otro para subirse a una camioneta color negro a la que la gente golpea, mientras otros intentan detenerla parándose enfrente.

Tras sortear a los inconformes la unidad avanza, pero detrás van los hombre y mujeres corriendo y lanzando improperios y reclamos.

Este martes, el mandatario habría encabezado una gira por tres municipios de la huasteca hidalguense, Yahualica, Xochiatipan y Huautla a más de 250 kilómetros al norte del estado para continuar con sus giras de las llamadas “Giras de la Transformación”, pero se encontró con los reclamos por la falta de apoyos para enfrentar las inundaciones que dejaron las recientes lluvias.

Yahualica además del resto de la huasteca se caracteriza por ser una de las zonas indígenas más pobres del estado, y las lluvias trajeron más pobreza al destruir las humildes viviendas.

Las carreteras, caminos de terracería y sus cultivos también sufrieron daños y nadie hasta ahora les ha brindado apoyo.

Y es que las recientes lluvias dejaron a un centenar de personas sin viviendas.
El propio alcalde de Yahualica, Zenón Navarro, aceptó que los daños fueron más graves de lo que esperaban, pero no hay recursos para atender a los damnificados.

Dijo que las familias afectadas demandan apoyo porque perdieron los techos de sus humildes viviendas, sus pocos muebles y colchones y prácticamente se quedaron sin nada por eso su desesperación.
Aunado a ello, sus cosechas se perdieron y sus caminos están devastados.

Tras el incidente, el gobierno del estado reaccionó de inmediato, suspendieron la feria de los servicios que se brindan en este tipo de giras pues los funcionarios de casi todo el gabinete acuden para prestar atención médica y solucionar diversas demandas, sin embargo, se anunció que todo se cancelaría.

El municipio informó que solo se daría atención para hacer algunos trámites y correcciones administrativas y que lamentaban las afectaciones tras los hechos de violencia ocurridos en el evento del gobernador.

Apenas hace unas semanas, al hablar de los daños que habían dejado las lluvias, declaró que ya no contrataría el seguro de daños catastróficos porque resultaba muy caro y que mejor buscaría alguna alternativa como un fideicomiso o alguna otra opción que no fuera tan onerosa para las finanzas estatales.