Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- A pesar de la contingencia sanitaria por el COVID-19, el estado de Chiapas ha podido avanzar en la construcción de redes a nivel comunitario de atención a los grupos vulnerables en materia de salud mental y adicciones, destacó Juan Manuel Quijada Gaytán, director de los Servicios de Atención Psiquiátrica de la Secretaría de Salud federal, al presidir la sesión de la Mesa Estatal de Coordinación de la Encuesta Nacional para la Prevención de Adicciones.
El funcionario federal manifestó que hace dos años inició la reconfiguración de la política pública enfocada al consumo de sustancias psicoactivas, con el surgimiento de la Encuesta Nacional para la Prevención de Adicciones (ENPA), la cual está enfocada en abordar a los protagonistas de este problema de salud pública: las familias, las comunidades y los pacientes, quienes tienen la necesidad de ser atendidos por el consumo de sustancias, algún trastorno mental, un intento de suicidio, entre otras situaciones.
En este sentido, subrayó que Chiapas ha logrado establecer una estrecha coordinación con los sectores involucrados, lo que ha permitido que expertos en el tema, funcionarios de los tres órdenes de gobierno y tomadores de decisiones favorezcan la promoción de prácticas de autocuidado para disminuir los riesgos y daños asociados al consumo.
Al respecto, el director de Salud Mental y Adicciones de la Secretaría de Salud del estado, Jesús Baltierra Hernández, resaltó que gracias al acompañamiento de las autoridades federales, en Chiapas se construye una verdadera política pública en salud mental, para acercar este servicio en el primer, segundo y tercer nivel de atención (centros de salud, hospitales y unidades médicas de alta especialidad, respectivamente).
Bajo ese contexto, presentó los avances de la ENPA a nivel estatal, donde desde septiembre de 2020, que se instaló la Mesa Interinstitucional de Salud Mental y Adicciones, a la fecha, se han instalado mesas distritales en Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de Las Casas, Comitán, Pichucalco, Tapachula, Tonalá y Motozintla; se han formado clubes por la Paz en Comitán, Palenque, San Cristóbal de Las Casas, Tapachula, Tonalá y Tuxtla Gutiérrez; y se han establecido coaliciones comunitarias en San Cristóbal de Las Casas y Tuxtla Gutiérrez.
“En Chiapas estamos decididos a contribuir con determinación hasta que logremos posicionar este nuevo paradigma, en un marco de respeto total a los derechos humanos”, aseveró el funcionario estatal.
En tanto, José Javier Mendoza Velásquez, director nacional de Coordinación de Estrategias, enfatizó que la comunidad es uno de los ejes prioritarios de la estrategia y por ello Chiapas es ejemplo al contar con una red de servicios de salud mental que centra su atención en las personas.
Estuvieron presentes en esta sesión de trabajo, Alejandro Álvarez Tostado, especialista en Reducción de la Demanda de Drogas de la Embajada de Estados Unidos; Diana Iris Tejadilla Orozco, directora nacional de Desarrollo de Modelo de Atención de Salud Mental; Evalinda Barrón Velázquez, directora de Vinculación Institucional de la Comisión Nacional contra las Adicciones; y representantes del ISSSTE, ISSTECH, secretarías de Bienestar, de Igualdad de Género y de Seguridad y Protección Ciudadana, Fiscalía General, DIF, Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, institutos de la Juventud y del Deporte, Congreso del Estado y Universidad Autónoma de Chiapas.