El estudio realizado por la Universidad de Basilea, Suiza, reveló que uno de cada diez encuestados reportó bajos niveles de salud mental, que incluía afecto negativo, estrés, conductas depresivas y una visión pesimista de la sociedad.
Un nuevo estudio liderado por científicos de la Universidad de Basilea (Suiza) ha recopilado datos sobre el impacto del confinamiento por la Covid-19 en 78 países, estableciendo una comparación de los niveles de bienestar entre todos ellos, y ha desvelado los factores más comunes que ayudaron a sobrellevar el encierro, así como los que lo dificultaron.
Al principio de la pandemia, se sabía poco sobre el impacto de un encierro en toda población, pues solo se conocían casos de cuarentenas restringidas en pequeños grupos de personas. “Por un lado, cambios tan drásticos en las rutinas diarias pueden ser perjudiciales para la salud mental“, explica co-líder del estudio, el profesor Andrew Gloster. “Por otro lado, debido a que toda la población se vio más o menos igualmente afectada durante el cierre, no quedó claro si este impacto ocurriría realmente”.
Para abordar esta cuestión, Gloster y sus colegas internacionales realizaron una encuesta ‘online’ en 18 idiomas. En ella, participaron alrededor de 10,000 personas de 78 países, que dieron información sobre su salud mental y la situación general durante el encierro del Covid-19.
Uno de cada diez encuestados reportó bajos niveles de salud mental, que incluía afecto negativo, estrés, conductas depresivas y una visión pesimista de la sociedad. Otro 50 por ciento tenía solo una salud mental moderada, que previamente se ha encontrado como un factor de riesgo para complicaciones adicionales. Estas cifras son coherentes con respecto a otros estudios que abordan el impacto de la pandemia en la salud mental.