Procedentes de Palenque y tras recorrer los estados de Yucatán, Oaxaca, Veracruz, Tabasco, Quintana Roo y Campeche, los más de 250 años integrantes realizaron este viernes un mitin en el que un representante del CNI dijo que “estamos resistiendo el embate del capital que tiene declarada la guerra de exterminio a las comunidades originarias”.
“Sabemos que este gobierno traidor está cobijado como buen samaritano con dádivas y apoyos de miseria que le está dando a nuestra gente, y esa gente cuando caminamos con la caravana se voltea para decir ‘que viva el tren maya’ y eso es muy grave, hermanos.
“Pero sabemos también que somos muchos los que estamos luchando indignados y exigiendo al capital que se largue de aquí, que nos deje en paz, que los pueblos originarios somos dignos y también defendemos la vida de esos cabrones”.
Agregó: “Estamos en guerra, nuestros hijos están en riesgo de vivir una miseria. Nos dicen que (proyectos como el tren maya) es progreso y eso es mentira, afirmó.
Dijo que los megaproyectos, “envenena la tierra, contaminan el agua, la saquean y vuelven mercancía el territorio”.
Por lo que hizo un llamado colectivo a que “nos sumemos porque no podemos avanzar solos ante esta guerra declarada a los pueblos originarios”.
El representante del CNI, pidió también al gobierno que “pare la militarización en todo el país”.
Una mujer otomí que Querétaro que participa en la caravana, manifestó que “somos la voz de los pueblos que luchamos los que le decimos a este mal gobierno que no queremos que nos maten (…) nosotras y nosotros queremos vivir, no queremos la muerte”.
Continuó: “Por eso le decimos al gobierno que está y al que viene: “cuando los pueblos se levantan por pan, libertad y tierra, temblarán los poderosos, de la costa hasta la sierra”.
El recorrido de la caravana comenzó el 25 de abril en el ejido Progreso, municipio de Pijijiapan, Chiapas, y después de 10 días llegó a San Cristóbal de las Casas poco antes de la media noche de este jueves.
El grupo, que durante le recorrido de 10 días estuvo acompañado por observadores del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), del Servicio Internacional por la Paz (Sipaz) y del Movimiento Sueco para la Reconciliación (SweFor), entre otros organismos, se alojó en las instalaciones del Centro Indígena de Capacitación Integral (Cideci)/Caracol zapatista Jacinto Canek, donde el fin de semana se realizará el encuentro internacional El sur resiste 2023.