Gloria Dinora Valdovinos Olvera, presidenta sustituta de Huixtla, debe aclarar ante la Auditoria Superior del Estado y la Fiscalía de Delitos Electorales la contratación de al menos 77 delegados especiales para trabajar en la campaña electoral de José Luis Laparra Calderón, quien trató de buscar la reelección por Morena en el municipio de la piedra.
Cabe hacer mención que estos 77 delegados especiales contratados por la alcaldesa sustituta se sumaron a los 130 supuestos trabajadores que venían operando desde el inicio de la administración de José Luis Laparra Calderón con miras a su reelección.
Según documentos que circulan en redes sociales, los delegados especiales que fueron pagados con el erario público y los impuestos de los huixtlecos tienen una supuesta nómina de alrededor de medio millón de pesos mensuales.
Estos supuestos trabajadores del municipio fueron contratados por la alcaldesa sustituta para los meses de marzo, abril, mayo y junio y tenían un salario que iban desde los 3 mil a los 7 mil pesos mensuales.
En la lista se encuentran familiares, amigos, aliados y esbirros de Laparra Calderón, quien aún sigue queriendo ganar la elecciones en un tribunal, a pesar de que tiene todas las de perder y que únicamente está alargando el proceso de entrega recepción, para tratar de limpiar todo el cochinero, así como la malversación de recursos públicos para seguir otros 3 años en el poder.
Ahora, Valdovinos Olvera, tiene toda la responsabilidad de aclarar el desvío de los recursos públicos con los que se pretendía favorecer al candidato emanado del partido en el poder en dicho municipio.
La alcaldesa sustituta tendrá que aclarar en la entrega recepción, porque utilizó recursos públicos para que operara una estructura electoral a favor de su ex patrón y candidato perdedor que dejó mal parado a Morena en el pasado proceso electoral.
