Cumbre representa unión de los 3 países

La Cumbre de Líderes de América del Norte (CLAN) representa un fortalecimiento en las relaciones entre México, Estados Unidos y Canadá, así como compromisos importantes en materia migratoria, económica y cambio climático, señalaron especialistas en temas internacionales.

A partir de este lunes 9 de enero y hasta el miércoles, los presidentes Andrés Manuel López Obrador, Joe Biden (Estados Unidos) y el primer ministro Justin Trudeau (Canadá) tendrán reuniones junto a delegaciones de alto nivel para abordar temas prioritarios en la agenda común.

Al respecto, Arlene Ramírez Uresti, especialista en temas internacionales por el Tecnológico de Monterrey, subrayó que hay un acercamiento trilateral en temas importantes en la región como migración, comercio y economía.

“[La cumbre] genera compromisos importantes. En el caso de los 30 mil migrantes que tendremos que recibir cada mes, adicionales a los que se han estado recibiendo, no solamente por el tema del Título 42 y las implicaciones que tiene todo esto, se genera una expectativa importante respecto a la forma en la que México puede atenderlos, y genera certidumbre para la agenda política del presidente Biden”, explicó.

Sobre los encuentros bilaterales, apuntó que son fundamentales en este tipo de cumbres porque “generan esta agenda que complementa los compromisos que se van a hacer desde las sesiones”.

“La política exterior en México para el gobierno actual no ha sido una prioridad, y de allí deriva este alejamiento y falta de dinamismo en la participación de México ante organismos internacionales. La prioridad ha sido la vista interna, de tal forma que la relación trilateral con nuestros socios comerciales del norte se ha enfriado y ha llegado al punto de tener disputas comerciales”, expresó.

Además, destacó que al ser México el país sede de la cumbre ayuda a disipar la idea de un alejamiento entre los presidentes López Obrador y Biden.

Aribel Contreras, maestra en estudios diplomáticos por el Instituto Matías Romero, considera que “este encuentro llega a través de una serie de cumbres que ya se venían dando en nueve ediciones anteriores. La primera fue en 2005, que me parece que ya había llegado muy tarde, porque el TLCAN empezó en 1994, y la idea era que anualmente se hiciera la cumbre, pero hubo una pausa en la era Trump”.