^ Quiso seguir siendo el “Coyote Consentido”
Yudiel “N” falleció dentro de un penal chiapaneco. Su muerte debe ser investigada con total transparencia pues estaba legalmente bajo la custodia del estado.
Maestro de la doble vida, pudo ocultar muy bien y durante largo tiempo su verdadera personalidad. Un perfil que fue descubierto por el propio FBI.
¿Qué le pasa a una sociedad que normaliza los narcocorridos? Se vuelve insensible
¿Queremos lo mismo con los depredadores de nuestras infancias?
¿A donde iremos como sociedad cuando nada nos duela ni nos defina como colectividad?
Yudiel “N” demostró que con las redes sociales se puede desinformar y tener seguidores.
Al comprobar el FBI su doble vida, nada pudo detener a la justicia. Esa misma que ahora debemos pedirla para esclarecer lo que le sucedió dentro del penal.
Malo es celebrar su supuesta “valentía” y sobre todo, hacerlo un mártir pues fue culpable de las peores aberraciones que pueden sufrir niñas y niños.
Nada justifica los actos atroces en contra de los más vulnerables, pequeñas y pequeños, que no son nombrados por protección.
Se está olvidando la evidencia en videos y fotos que son desgarradores; se está olvidando que la investigación de esos actos atroces la hizo la justicia de Estados Unidos a través del FBI, porque “El Coyote Consentido” guardó fotos y videos violando a niñas y niños, Google lo detectó en su dispositivo y avisó al FBI, quien a su vez lo denunció ante el Gobierno Mexicano, mismo que pidió a la Fiscalía de Chiapas que actuara y fue así como pusieron tras las rejas a este depredador-.
“Yudiel N” sabía que estaba siendo investigado y en su perversidad se inventó la figura de activista, para evadir a la justicia. Pero esta llegó con una sentencia de 67 años,
Como sociedad, ¿vamos a permitir la indiferencia ante los que atentan contra nuestras infancias?
