Edgar Hernández
Chiapas. Abril 08.— Un enfrentamiento entre presuntos traficantes de personas y elementos de la Guardia Nacional se registró esta madrugada en el municipio de Pijijiapan, Chiapas -uno de los puntos en la ruta migrante del pacífico-, sin que se reporten detenidos ni heridos, informaron fuentes de seguridad.
La disputa a balazos ocurrió luego que la Guardia Nacional en coordinación con la Fiscalía de Chiapas y la Policía del Estado patrullaban la zona y hallaron un camión abandonado con rastros que transportaba personas, presuntamente migrantes.
Hombres armados que se desplazaban en una camioneta iniciaron los disparos de armas de fuego cuando las autoridades inspeccionaban la unida abandonada, por lo que iniciaron una persecución.
Los presuntos traficantes huyeron entre la maleza y también dejaron la camioneta en la que viajaban.
Mientras tanto, la Fiscalía Estatal abrió una investigación por los hecho y puso a disposición del Ministerio Público los dos vehículos abandonados.
Y hacen redadas contra migrantes
El Instituto Nacional de Migración y la Guardia Nacional hacen una búsqueda intencionada de migrantes en plazas públicas y hoteles de la frontera sur como parte del plan para contener el flujo de personas indocumentadas hacia los Estados Unidos.
Desde el fin de semana pasado las autoridades inspeccionan sitios de hospedaje y patrullan colonias de Tapachula, la principal ciudad fronteriza con Guatemala, para asegurar a quienes no comprueben su legal estancia en el país.
Los Hondureños y Guatemaltecos concentran el 80 por ciento de los aseguramientos de migrantes indocumentados en México, de acuerdo a datos del 2020.
Tan sólo en el primer trimestre de este año el Gobierno de México ha deportado a 11 mil 318 hondureños, la mitad de los deportados en todo el año pasado cuando la cifra alcanzó 22 mil 419, de acuerdo al Observatorio Consular y Migratorio de Honduras.
En tanto que en el mismo periodo- enero a marzo- fueron retornados 8 mil 672 guatemaltecos. El año pasado la cifra alcanzó 22 mil 166 guatemaltecos deportados,
Fernando Castro Molina, ex Viceconsul de Guatemala en Chiapas, consideró que estas acciones en hoteles son una intromisión a la intimidad de las personas y representan una violación a los derechos humanos.
El ahora consultor migratorio dijo que esas detenciones al no contar con ordenes de allanamientos podrían ser ilegales y obligaría a las autoridades mexicanas a brindar asilo a los migrantes.
“Hay una crisis migratoria hacia Estados Unidos y el flujo ha sobrepasado a las autoridades”, externó.
Además, Castro Molina dijo que existe un trabajo pendiente de las autoridades de los países involucrados para atacar a las redes de tráfico de personas que hoy en día cobran hasta 11 mil dólares – unos 220 mil pesos mexicanos- para llevar a las personas de Guatemala a Estados Unidos.